Casi tres años, por culpa de la pandemia, han tenido que pasar para que la hermandad de Nuestro Padre Jesús de la Paz en su entrada triunfal en Jerusalén y María Santísima de la Palma vuelvan a pisar las calles y el pueblo no le ha defraudado y una inmensa cantidad de público volvió a vivir la semana de pasión en su primer día de Domingo de Ramos.
Conocida comúnmente como “La borriquita”, pues representa la entrada de Jesucristo en Jerusalén montado en una pollina, la hermandad fue fundada en 1956 y tiene su sede en la iglesia de San Agustín. Le acompaña el palio de María Santísima de la Palma, cuya talla data del siglo XVII. Es una de las procesiones más queridas pues es la que abre las puertas de la Semana Santa marciense.
La Semana Santa de Marchena es la conmemoración Cristiana de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo y un importante evento cultural y turístico. Catalogada de Interés Turístico Nacional, la Semana Santa es vivida con intensidad por los marcheneros, que se preparan todo el año para la fecha. Siete hermandades procesionan, muchas de ellas fundadas entre los siglos dieciséis y diecisiete.